Durante el siglo XIX el mundo de la moda estuvo marcado por grandes nombres, pero hoy sólo quiero dedicarle este artículo a uno: Louis Vuitton. Muchos de vosotros lo reconocéis por su estampado Monogram, el cual fue creado por el hijo de Vuitton en 1896 para evitar cualquier tipo de falsificación, convirtiéndolo en el sello de identidad de la firma. Único y cargado de motivos geométricos es uno de los diseños más deseados por el público femenino y también masculino.