Como estudiante del curso de Relaciones Públicas, Visual Merchandising y Estilismo he tenido la oportunidad de asistir a un desfile. Asistí muy emocionada y con los ojos bien abiertos a un evento en el que la organización transcurrió con toda normalidad, algo que no hay que obviar cuando se trata de eventos que se tienen que planear al milímetro y en los que los fallos no deben existir o deben pasar inadvertidos.