Toda adicta a la moda sueña con acudir a un desfile y poder ver en vivo y en directo la puesta en escena de sus diseñadores favoritos.
Me imagino que para ellos debe ser un momento en el que sentimientos variados estallan. Todo su trabajo va a ser expuesto ante el público más exigente y crítico del sector, y todo debe estar perfecto sin olvidar el más mínimo detalle.