La casa italiana de la  alta costura francesa abrió la pasarela en la Semana de la Alta Costura de París bajo el título de Inferno Couture, inspirado en el clasico de la literatura La Divina Comedia de Dante. 

  Schiaparelli es una  de las marcas de ropa de alta costura más icónicas de la historia, fue fundada en París en 1927 por la diseñadora italiana Elsa Schiaparelli y destacó por el uso innovador de materiales y colores, así como por la colaboración con artistas de la época como Salvador Dalí y Jean Cocteau. La marca cerró en 1954, pero fue relanzada en 2013.  En un sector y un ámbito como es el de la alta costura, lo excesivo estaba dejando de ser leitmotiv para centrarse en la forma y corte. Sin embargo, tal y como fueron los inicios de Schiaparelli, esta vez, el arranque de la semana de la moda lo ha dirigido Daniel Roseberry removiendo el surrealismo y dando el altavoz a un minimalismo con ciertos toques excesivos.  Centrándose en realzar la cintura, a su vez, el diseñador norteamericano que lleva dirigiendo la casa desde 2019 juega con el seductor traje de esmoquin que Saint Laurent reinterpretándolo, añadiendo prendas que incluyen enormes bustiers e incluso las hombreras XL. Y donde unas botas con unos dedos silueteados pisan fuerte al compás y batuta de Roseberry. También, las emulaciones del cuerpo humano a través de piezas esculturales cobran vida a través de algún torso que ha pintado de color dorado. 
  "Elsa Schiaparelli siempre sorprendió con su trabajo y, con los años, la gente ha aprendido a venir a Schiaparelli con espíritu de curiosidad. No sabes lo que te vas a encontrar"
Y aunque ha tenido ciertas críticas, el hecho es que las llamativas cabezas de los animales suponían una vuelta al significado de la piel, todas ellas estaban hechas de goma espuma, resina y pelo falso que en la pasarela los desfilaron las top models Naomi Campbell, Irina Shayk y Shalom Harlow representando la lujuria, el orgullo y la avaricia y que radicaban a su vez en la adaptación que ha hecho Roseberry de la preferencia de su antecesora (Elsa Schiaparelli) por las pieles exóticas. 
“En el primer ciclo del viaje de Dante, hace frente a los terrores. Confronta un león, un leopardo y una loba. Cada uno de ellos representa diferentes cosas, pero el león y los animales están ahí como una aproximación fotorrealista diferente al surrealismo y el trampantojo”, ha dicho el diseñador.

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