Desde muy pequeña me preguntaban, como a la mayoría de niños y niñas: María, ¿qué quieres ser de mayor? Durante mucho tiempo la respuesta tenía sentido; veterinaria, doctora o diseñadora de moda, este último era mi caso, jugaba con las famosas muñecas Barbie, todas llevaban siempre su estilismo impoluto, con algunas prendas que yo misma confeccionaba siempre con ayuda de mi gran ejemplo, mi madre.